Recientes investigaciones han sacado a la luz una asombrosa red de carreteras indígenas de más de mil años, ubicadas cerca del Parque Histórico Nacional de Cultura Chaco, en Nuevo México. Utilizando tecnología de LiDAR, que emplea láseres para mapear el terreno, los científicos han descubierto una segunda carretera que se extiende paralela a la primera. Lo más fascinante es que ambas están alineadas con el sol naciente durante el solsticio de invierno.
Estos caminos no solo servían para la locomoción de los pueblos indígenas, sino que desempeñaban un papel crucial en su paisaje ritualístico. No era solo un medio para llegar a fuentes de agua, sino también un componente de su cosmovisión y espiritualidad. Cuando el sol se eleva en el solsticio y proyecta su luz sobre el Monte Taylor, un volcán sagrado para las comunidades nativas, la luz se alinea perfectamente con estas antiguas rutas.
El impacto del LiDAR en el estudio arqueológico
El uso de LiDAR ha revolucionado la forma en que los arqueólogos exploran y comprenden estas estructuras. Al enviar millones de pulsos de luz hacia el suelo, los investigadores pueden crear un mapa detallado de la topografía y las características ocultas del terreno. Inicialmente, solo se conocía una pequeña sección de la carretera, de menos de 100 metros, pero el análisis ha revelado que se extiende a lo largo de 6 kilómetros, confirmando la importancia de estos caminos en la cultura Chaco.
La cultura Chaco, que floreció entre los años 850 y 1250 d.C., es un tema intrigante. Se cree que su notable desarrollo urbano y social podría haber estado vinculado a un movimiento religioso, aunque los detalles de sus creencias siguen siendo un misterio. Las carreteras, que alcanzan una anchura de 9 metros, sugieren que no eran meramente funcionales, sino que tenían un significado ritual que aún está por desentrañarse.
A medida que avanza la investigación, se hace evidente que comprender la relación entre estas carreteras y la espiritualidad indígena es esencial. Sin embargo, los proyectos de generación de energía en tierras públicas podrían amenazar estos importantes sitios arqueológicos, lo que añade una capa de urgencia a la protección y estudio de este patrimonio cultural.