En un avance notable para la conservación de los osos polares, un equipo de investigadores ha capturado imágenes impresionantes de cachorros de oso polar saliendo de sus madrigueras en Svalbard, Noruega. Este fenómeno ocurre entre febrero y abril, cuando los pequeños tienen entre dos y tres meses de vida y ya pesan alrededor de diez kilos. A menudo, estos oseznos son acompañados por sus madres, quienes los guían en sus primeros pasos en el mundo exterior.
Este estudio coincide con la celebración del Día Internacional del Oso Polar, y ha sido publicado en la revista Journal of Wildlife Management. A través de casi una década de observaciones, los investigadores han podido documentar momentos clave en la vida de estos animales, resaltando la importancia de su periodo de vida más vulnerable. Se estima que menos del 50% de los oseznos logran alcanzar la edad adulta, lo que subraya la importancia de proteger sus hábitats.
El desafío de la supervivencia
Los científicos advierten que la expansión de actividades industriales en el Ártico pone en peligro estos cruciales espacios donde los osos construyen sus madrigueras. La investigación enfatiza la necesidad de resguardar estas áreas para garantizar la supervivencia de la especie. En este periodo, los cachorros deben adaptarse al entorno exterior, lo que es fundamental para su desarrollo.
Para llevar a cabo este estudio, se utilizaron collares GPS en hembras de oso polar, permitiendo a los investigadores rastrear su ubicación y actividad. A partir de estos datos, se colocaron cámaras trampa en trece sitios diferentes, lo que resultó en una valiosa recopilación de información sobre el comportamiento de las madres y sus crías.
Características de los oseznos
Los oseznos nacen en pleno invierno, alrededor de Año Nuevo, y son completamente vulnerables al nacer: ciegos, sin pelo y pesando apenas medio kilo. Sin embargo, su crecimiento es impresionante, alimentándose de la rica leche materna, que contiene un 31% de grasa. Para la primavera, alcanzan un peso de aproximadamente diez kilos.
Durante su primera salida, los oseznos pueden permanecer en las cercanías de sus madrigueras por un periodo que varía entre 2 y 31 días. Sin embargo, su dependencia de la madre es notable, ya que rara vez se aventuran solos. Las cámaras trampa registraron que solo el 5% del tiempo se vieron a los cachorros sin la compañía de su madre.
La importancia de la maternidad
Las madres de osos polares construyen sus refugios bajo la nieve en áreas remotas del Ártico y cuidan de sus crías hasta que estas alcanzan aproximadamente los 2,5 años de edad. Este cuidadoso proceso de crianza es esencial para la supervivencia de los oseznos.
Con la declaración del Día Internacional del Oso Polar cada 27 de febrero, se busca crear conciencia sobre la fragilidad de la vida de estos animales durante su periodo de salida de la madriguera. Como concluye Jon Aars, uno de los autores del estudio, «esta investigación establece las bases científicas necesarias para mejorar la protección de esta especie, minimizando los conflictos entre las áreas de madrigueras y la actividad humana».