El archipiélago de Fernando de Noronha es famoso por sus aguas cristalinas y la presencia de los delfines Stenella longirostris, comúnmente conocidos como delfines giradores o acróbatas. Estos increíbles animales no solo brindan un espectáculo visual a los turistas con sus saltos y giros; sus acrobacias son en realidad un medio de comunicación entre ellos.
Desde hace 30 años, el Proyecto Delfín Girador, respaldado por Petrobrás, se dedica a estudiar el comportamiento de estos delfines en la Bahía de los Delfines. A lo largo de este tiempo, han documentado más de 8.566 actividades aéreas, la mayoría realizadas por delfines adultos. Este estudio ha arrojado luz sobre cómo estas acrobacias forman parte de un sistema de comunicación no verbal.
¿Qué significan sus acrobacias?
Las acrobacias no son solo para impresionar a los humanos. Cada salto tiene un significado específico. Por ejemplo, los saltos horizontales hacia adelante indican la dirección que el grupo debe seguir, mientras que los saltos verticales refuerzan la cohesión del grupo, especialmente durante la alimentación o la reproducción.
Un hecho interesante es que el 88% de estos saltos son realizados por delfines machos, lo que sugiere que ellos asumen roles de liderazgo y protección dentro del grupo. Los delfines jóvenes, por su parte, están en proceso de perfeccionar sus rotaciones, que representan el 67,77% de sus movimientos.
El delfín girador recibe su nombre debido a su habilidad de girar en el aire mientras salta. Con una longitud promedio de 2,4 metros y un peso de 80 kilos, estas acrobacias son verdaderamente impresionantes.
Los investigadores han identificado seis momentos clave en la vida diaria de los delfines: entrada en la bahía, organización del grupo, turnos de descanso, reorganización y salida. Las acrobacias son más frecuentes durante la organización, pero también se realizan en situaciones de peligro, como al detectar tiburones, donde emplean una estrategia conocida como porpoising.
El año 2024 marcó un récord para Fernando de Noronha con la llegada de 131.503 turistas. Este aumento en la actividad humana puede generar estrés en los delfines y alterar sus patrones de comportamiento. Según el oceanógrafo José Martins, es fundamental implementar proyectos de monitoreo y regulación para asegurar una convivencia sostenible entre humanos y delfines.
A continuación, exploramos el significado de siete maniobras que realizan los delfines giradores:
Golpe de cabeza
El delfín solo saca su cabeza del agua y golpea la superficie con ella. Este movimiento indica un desplazamiento a baja velocidad en grupo pequeño.
Golpe de cola
Con el vientre hacia arriba, el delfín golpea su cola repetidamente en la superficie, agrupando a un número reducido de delfines.
Caída de espaldas
El delfín se arquea y cae de espaldas, indicando un movimiento lento en grupo pequeño.
Salto
El famoso salto que todos conocemos, que puede indicar una situación de estrés por la presencia de peligros.
Rotación
El delfín gira en el aire, creando un sonido estruendoso al caer, lo que indica un desplazamiento en alta velocidad.
Inversión
El delfín se eleva casi verticalmente y cae de cola, sirviendo para agrupar a muchos delfines.
Pirueta
Una compleja combinación que involucra inversión y rotación, utilizada para reunir a grandes grupos de delfines.